La SEOM (Sociedad Española de Oncología Médica) da a conocer la evolución y los avances médicos que se han sucedido desde 1970 en el tratamiento de los diferentes tumores de mama.
Sobre el tratamiento del cáncer de mama HER2-positivo, explicaron que en estos últimos años hemos vivido el desarrollo de un grupo de fármacos, los conjugados anticuerpo-fármaco (ADC), en los que anticuerpos dirigidos frente a proteínas del tumor están unidos a un fármaco citotóxico, que es liberado dentro de la célula tumoral de forma selectiva. Entre ellos destaca el medicamento “trastuzumab deruxtecan, protagonista indiscutible de estos últimos años, al demostrar beneficios de gran magnitud en pacientes con cáncer de mama HER2-positivo.
Otra de las novedades es tucatinib, un nuevo fármaco con gran actividad a nivel del sistema nervioso central, lugar frecuente de metástasis en pacientes con cáncer de mama HER2-positivo. Hace dos décadas, estos tumores eran considerados los de peor pronóstico y en el momento actual muchas pacientes logran largas supervivencias gracias a los fármacos desarrollados.
AVANCES EN TRIPLE NEGATIVO
En cuanto a la investigación en cáncer de mama triple negativo, los especialistas señalan que “se consolida la inmunoterapia en primera línea de tratamiento entre las pacientes cuyo tumor expresa PD-L1. Esta opción de inmunoterapia mejora la supervivencia, los cual se considera “un hito” en estas pacientes de especial mal pronóstico.
Por otra parte, en las pacientes con cáncer de mama triple negativo precoz, se ha rediseñado el algoritmo terapéutico al irrumpir la inmunoterapia. Los oncólogos de la SEOM destacan el fármaco pembrolizumab, en combinación con la quimioterapia pre-quirúrgica, aumenta las respuestas completas patológicas y sobre todo reduce de forma significativa las recaídas. Además, en las pacientes con mutación en BRCA1/2 de alto riesgo, el tratamiento con olaparib durante un año ha demostrado disminuir la mortalidad en estas pacientes.
NOVEDADES EN CÁNCER LUMINAL
Según la SEOM, en cáncer de mama luminal, el más frecuente, se consolida el papel de los inhibidores de CDK4/6 (palbociclib, ribociclib y abemaciclib), junto con la hormonoterapia en el tratamiento de las pacientes con enfermedad avanzada.